Todo se desarrolla en Wisconsin, en los años cincuenta.
Al noreste del Pacífico hay un asesino en serie.
Sus crímenes son de naturaleza sexual.
Sus víctimas son mujeres de entre 17 y 25 años.
La mayoría son chicas universitarias.
Antes de matarlas, su forma de operar es:
Primero torturarlas y violarlas para después desecharlas en el bosque a donde a menudo regresa a esos cuerpos para seguir violándolas.
Esta es la historia de Ed Gein, mejor conocido como “El Carnicero de Plainfield”, uno de los asesinos en serie más brutales que haya existido en Estados Unidos.
“Monstruo: La historia de Ed Gein”, (Monster: The Ed Gein Story), 2025, desnuda la vida y los crímenes de Ed Gein, conocido por inspirar películas de terror como “Psicosis”, “La matanza de Texas” y “El silencio de los inocentes”.
Protagonizada por Charlie Hunnam y dirigida por Ryan Murphy, la tercera temporada de Monstruo”, creada por el mismo Murphy e Ian Brennan para Netflix es oscura y perturbadora.
Es una historia que, aunque ya es del dominio público, no deja de impactar por la saña con la que Ed mataba a sus presas: Además saqueaba tumbas para usar partes de sus cuerpos para confeccionar artículos domésticos y ropa.
Ed gustaba de ponerse la ropa intima de su madre para masturbarse, cosa que a ella, aunque aparentemente se enfadaba, muy en el fondo gozaba ver a su hijo hacer eso.
Una cosa que no está a discusión es que Murphy sabe y es un experto en contar historias de asesinos seriales.
Ya nos regaló “Dahmer”, 2022, que fue más allá de lo excelente.
Después nos recetó “The Menendez Brothers”, 2024 y, aunque no logró lo brillante de “Dahmer”, estuvo muy decente.
Ahora, para cerrar la trilogía de “Monstruo” llega con una aguerrida y ostentosa publicidad “Monstruo: La historia de Ed Gein”.
¿Los resultados?
¡Buenisimaaaa…!
Ok, “Monstruo: La historia de Ed Gein” no le pisa los talones a “Dahmer”.
Ok, “Monstruo: La historia de Ed Gein”, tampoco está a la altura de “The Menendez Brother”.
Pero está disfrutable y lo que es mejor, nos remonta a muchos filmes de terror inspirados en este personaje.
Aquí está todo el sello de Ryan: Sexo sin freno, personajes retorcidos e historias macabras.
Aquí está el sello de Ryan: Le da un toque “rosa” hasta a uno de los asesinos más crueles de todos los tiempos.
Quizá el único “pero” que le pongo a esta serie de 8 capítulos es que Ryan se haya permitido muchas licencias tanto en la historia como en la representación de Ed Gein.
Uno: A Ed lo pintan como alguien tonto y esquizofrénico: En la vida real era un hombre hasta cierto punto de una inteligencia promedio.
Dos: Ed nunca tuvo novia. Las mujeres lo ignoraban y en esta versión casi lo ponen como un Don Juan.
Tres: Ed era un tipo nada agraciado y en la historia lo representa un actor de cuerpo súper atlético, varonil y guapo.
Lo que no se puede negar es que las actuaciones de Laurie Metcalf como Augusta Gein y Charlie Hunnam como Ed Gein son brillantes y espectaculares.
Joey Pollari como Anthony Perkins y Tom Hollander como Alfred Hitchcock, aunque no tienen mucha exposición, resalta el trabajo de cado uno de ellos.
Las obsesiones enfermizas por su madre y la devoción morbosa por lo macabro, hacen de “Monstruo: La historia de Ed Gein” una serie impactante, con escenas fuertes pero necesarias.
En una escala de 5 al 10, sin tocarme el corazón le doy un 9.