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“Devorados” es una película fuerte e inquietante que bien vale la pena ver

 

Pocas veces una película me pone los nervios de punta y “Devorados”, (“Swallowed”), 2022, lo logró.
La travesía de “Devorados” va más al suspenso que al terror y su director y escritor, el cineasta norteamericano Carter Smith, definitivamente ofrece un trabajo impecable, de principio a fin.
Smith, quien también escribe la historia, brinda una estupenda construcción de suspenso que uno acaba con los nervios de punta.
El curso de “Devorados” sigue a Ben (Cooper Koch) y Dom (José Colón), dos amigos que viven su última noche juntos en un bar ya que Ben, quien se ejerce como un actor gay porno, decide marcharse a Los Ángeles en busca de nuevas oportunidades.
Ben, quien se alza como todo un heterosexual, quiere ayudar a su amigo con algo de dinero, por ello acepta la oferta de una vendedora de drogas llamada Alice (Jena Malone).
Todo parece ir viento en popa hasta que Alice tiende sus reglas para el traslado de la droga, cosa que inquieta y asusta a los dos jóvenes.
Alice los amenaza a punta de pistola y Dom tiene que tragarse pequeñas bolitas donde viene la droga, estas bolitas traen dentro pequeños insectos que, a un movimiento en falso, se rompen y pueden provocar la muerte.
Y es aquí cuando la película se dispara en un suspenso increíble.
La narrativa de “Devorados” es ágil, fluye de una manera tan rápida que cuando uno acuerda ya el terrible desenlace está en puerta.
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El punto fuerte de esta cinta son los actores, estupendos y creíbles cada uno de ellos.
También está la fotografía sencilla pero sustanciosa que ayuda en mucho para crear esa atmosfera oscura e inquietante.
En “Devorados” ronda el tema de la homofobia en repetidas ocasiones, un punto importante en la historia.
Cooper Koch regala una actuación paralizante, convincente y con una perfecta dosis de drama; se luce en cada una de las escenas y sabe exprimir hasta la última gota ese don de actor que carga a cuestas.
Por el mismo camino va José Colón quien arropa un papel fuerte, con escenas y desnudos fuertes y todo lo realiza con una naturalidad de diez.
La participación de Mark Patton como el antagonista psicópata le agrega más poder al filme; él es el prototipo del sujeto que en su poder económico cree tener el derecho de maltratar y humillar a quienes son de la comunidad LGBTQ+.
Me gustó y mucho el trabajo de la actriz Jena Malone como la vendedora de drogas, ella, tan en su papel que llegué a “odiarla”.
“Devorados” es un largometraje que hay que entender con los nervios en perfectas condiciones.
Está en la plataforma de Looke y créame, está de 10.