La relocalización de la empresa, señaló la diputada de Morena, sería por causa de utilidad pública y contaminación
Porque el derecho a la salud de la ciudadanía está por encima de cualquier interés, la diputada morenista Brenda Velázquez presentó un Punto de Acuerdo en la Sesión Permanente del Congreso para llamar al Gobierno estatal a que analice la posibilidad de reubicar empresas contaminantes como Ternium de México.
Estas compañías están ubicadas en Monterrey y San Nicolás, en zonas densamente habitadas y su reubicación sería por causa de utilidad pública.
Tras argumentar el derecho a la salud y a la ciudad, Velázquez, señaló que pese a las sanciones previas, la localización de estas plantas sigue siendo un peligro constante para las comunidades aledañas y para los estudiantes de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
La legisladora aclaró que la Cuarta Transformación impulsa el desarrollo económico, por lo que exhorta a que les permitan mantener la capacidad productiva y los empleos generados por la empresa y a hacer efectiva una política estatal de desarrollo económico con criterio en la prevención y mitigación del impacto ambiental.
“Las constantes quejas de la ciudadanía, que incluyen no solo contaminación atmosférica sino también la posible exposición a sustancias peligrosas, son cada vez más fuertes”, señaló Velázquez. “Desde hace años, los vecinos y la comunidad educativa de la UANL han exigido soluciones más eficaces, y la reubicación de estas plantas es una de las principales demandas de la población”.
Velázquez consideró que la permanencia de las instalaciones contaminantes en zonas altamente pobladas es una violación directa al derecho a la ciudad sustentable, reconocido en el artículo 48 constitucional.
Este garantiza que las personas puedan habitar, utilizar, ocupar, transformar y disfrutar de ciudades sostenibles, que les permitan tener una vida digna.
“Se subraya la necesidad de ubicar las industrias en áreas específicamente diseñadas para su operación, alejadas de zonas residenciales y educativas, asegurando que la calidad de vida de los habitantes no se vea afectada por actividades industriales, protegiendo tanto el bienestar de la población como el equilibrio ecológico y social”, detalló.